Sandra Gamarra , Lima, 1972

Basándose en fotografías de Edi Hirose, Sandra Gamarra recrea el traslado del cuadro “Los Funerales de Atahualpa” (1867) de Luis Montero, de su histórica ubicación en la escalera del MALI, durante la remodelación del museo. En sintonía con la apuesta criolla que fundó esta nación, Montero resalta las honras fúnebres del Inca—antes que su ejecución—enfatizando lo europeo. Al retratar el cuadro envuelto, Gamarra lo anula, haciendo eco del “Museo de arte borrado” de Emilio Hernández Saavedra (también retratado por Gamarra), articulando academicismo y conceptualismo, e introduciendo una perspectiva crítica sobre la historia que se representa, enseña y difunde.

Óleo sobre papel, 33 x 50 cm